Ocurre que la Piazza San Marco por sí sola es un museo al aire libre, con muchos vestigios de la milenaria ciudad de Venecia que como sabéis, celebra este año 1600 años desde su fundación.

La Basílica, el Campanile, el Palacio Ducal, las Procuradurías o la Torre del Reloj, inabarcables en una visita y mucho menos en un vistazo rápido, suelen restar protagonismo a otras joyitas que más o menos escondidas, podéis localizar en la Plaza.

Os hablé por ejemplo del pozo enterrado cuyas marcas son visibles aún hoy junto a la inscripción que indica cuándo fue eliminado, o de la meridiana que se ”esconde” al lado izquierdo de la Basílica. Bien, pues hoy, vengo a hablaros de otra de ellas: las columnas de Acre, que se encuentran en el lado derecho de la basílica, cerca de los Tetrarcas y de la puerta de la Carta del Palazzo Ducale y que entre tanto arte pasan bastante desapercibidas.

Y ¿qué son las columnas de Acre? Pues se trata de dos columnas talladas que llegaron a la ciudad tras la conquista de Acre en el siglo XIII, un puerto fundamental en el comercio marítimo que llegó a ser capital del Reino de Jerusalén.

Aunque no estuvo mucho tiempo bajo el dominio de la Serenissima antes de volver a manos musulmanas, fue un importante puesto comercial no solo para los venecianos, sino también para los genoveses, otra de las Repúblicas Marineras principales de la Edad Media y con la que se compartió el dominio sobre la ciudad.

Pero no por mucho tiempo… en 1258 tuvo lugar una batalla naval entre ambas potencias que se saldó con la victoria aplastante de Venecia, mejor formada, más experimentada y mejor equipada. Desde entonces, Venecia monopolizó el comercio con Oriente y estas preciosas columnas llegaron a la ciudad para nunca marchar.

Foto: Venezia e il Veneto

Lo cierto es que su ubicación parece hecha al azar y sin ningún sentido, no parece que tengan ninguna finalidad más allá de ornamentar, más aún, la propia Basílica. Y si a ello añadimos que no se ha podido descifrar lo que significan las inscripciones que hay en ellas, podéis imaginar lo que pasa… Cuando algo no se entiende, ya sabéis que da lugar a todo tipo de interpretaciones misteriosas y, en este caso, no ha sido menos: se dice que representan la entrada que conduce a otra dimensión o incluso que se trata de símbolos masónicos. Cada uno que piense lo que quiera…jeje.

¿Os habías fijado en ellas? ¿No? Pues la próxima vez, os invito a que os detengáis un momento y disfrutéis de algo formidable. A mí me parecen divinas…